Carga Aérea de China a México Crece 550%: caso e-commerce
Entre 2021 y 2024, México ha visto cómo la carga aérea procedente de China se dispara un 550%, representando ahora el 27.5% de todas las mercancías que llegan por avión.
El volumen de carga aérea proveniente de China que ha llegado a México ha crecido un 550% en los últimos tres años, lo que representa un aumento significativo en el comercio bilateral impulsado por el auge del e-commerce.
Esta situación ha transformado el panorama de las importaciones y la logística en México, con un impacto directo en el mercado nacional. Las plataformas chinas de comercio electrónico como AliExpress, Temu y Shein han sido protagonistas de este cambio, facilitando la venta directa de productos asiáticos a consumidores mexicanos, lo que ha permitido ofrecer precios competitivos y ha generado una mayor demanda de productos importados.
Este crecimiento no solo ha impulsado la llegada de más mercancía a través de vuelos regulares, sino que también ha fomentado la diversificación de rutas aéreas entre China y México, con nuevos servicios regulares y chárter que conectan ciudades chinas clave con centros logísticos mexicanos como el Aeropuerto Internacional Felipe Ángeles.
Esta ampliación de la infraestructura aérea es un punto fuerte para la economía mexicana, ya que fortalece la conectividad internacional y mejora la capacidad del país para manejar grandes volúmenes de mercancías.
A su vez, el desarrollo de grandes almacenes urbanos dedicados a la importación de productos chinos, como los de la Ciudad de México, es una ventaja estratégica, permitiendo una mayor flexibilidad en la distribución y almacenamiento de productos.
En el 2021, la carga aérea procedente de China representaba 5.3% del volumen total de mercancía que llegó a México por avión y hasta el mes de julio pasado, ese ratio se disparó a 27.5 por ciento.
El crecimiento en la importación de bienes chinos presenta, sin embargo, ciertos desafíos. El régimen de mínimis, que facilita la importación libre de aranceles para productos de bajo valor, ha sido aprovechado por los grandes marketplaces chinos, lo que crea una competencia desleal para los productores y distribuidores mexicanos.
Esta situación subraya una debilidad en la normativa comercial vigente, ya que el régimen no fue diseñado para el volumen de comercio electrónico actual. Además, la dependencia de las plataformas chinas y la entrada masiva de productos asiáticos puede afectar negativamente a los productores locales, quienes deben enfrentar una competencia feroz en términos de precios y disponibilidad de productos.
Las empresas mexicanas, por su parte, tienen la oportunidad de adaptarse y aprovechar este crecimiento del comercio internacional. El incremento en la demanda de productos importados y la expansión de la infraestructura logística abren oportunidades para que los negocios locales colaboren en la cadena de suministro, participen en el sector de distribución y almacenamiento, o incluso en la creación de alianzas estratégicas con empresas chinas.
México, además, puede capitalizar en el fenómeno del nearshoring, utilizando su ubicación geográfica y la infraestructura desarrollada para establecerse como un puente clave para las empresas chinas que buscan acceder al mercado de Estados Unidos. Este crecimiento del comercio aéreo también podría impulsar el desarrollo de nuevos servicios y mejorar la competitividad logística del país, lo que generaría beneficios a largo plazo.
A pesar de las oportunidades, existen amenazas significativas que el mercado mexicano debe considerar. El dominio de las plataformas de e-commerce chinas podría desplazar a los comercios locales, afectando el equilibrio del mercado interno. Además, la creciente influencia de empresas extranjeras en el sector de distribución y logística plantea el riesgo de una excesiva dependencia de estas plataformas para el flujo de bienes, lo que podría comprometer la soberanía económica en áreas clave.
A nivel global, la creciente tensión geopolítica entre potencias como Estados Unidos y China también podría tener implicaciones para México, ya que cualquier cambio en las relaciones comerciales podría alterar drásticamente el flujo de mercancías y las políticas de importación.
El incremento en la llegada de carga aérea desde China a México presenta un escenario mixto de grandes oportunidades y desafíos para el mercado mexicano. El país ha fortalecido su infraestructura logística y su capacidad para manejar un volumen significativo de mercancías, lo que genera ventajas competitivas. Sin embargo, la creciente influencia del comercio electrónico chino también presenta riesgos que deben ser abordados para proteger a los productores locales y mantener un equilibrio en el mercado. Adaptarse a estos cambios, capitalizando las fortalezas y gestionando cuidadosamente las amenazas, será clave para el futuro del comercio internacional en México.
Colaboración: Editorial Auge.